Las irregularidades en la Federación Internacional de Boxeo (AIBA) ponen en jaque a la disciplina para el evento que se desarrollará en la capital japonesa.
La Federación Internacional de Boxeo (AIBA) inicia una semana decisiva para su futuro, en la que el Comité Olímpico Internacional (COI) podría decidir retirarle la organización del torneo de los Juegos de Tokio 2020.
Problemas de gestión en la organización, sospechas de combates arreglados en Río 2016, un programa antidopaje criticado y las constantes preocupaciones sobre su salud financiera forman parte de la problemática que pone en jaque a la AIBA en los últimos años.
La llegada a su presidencia en noviembre de 2018 del empresario uzbeko Gafur Rakhimov, que luego tuvo que dimitir, fue la gota que colmó la paciencia de muchos. En diciembre, el COI había anunciado que la organización del torneo olímpico de boxeo quedaba congelada y que habría una investigación sobre la AIBA, que ha atravesado largas y repetidas crisis desde los años ´80.
El lunes, varios responsables de la AIBA, entre ellos su presidente interino, el marroquí Mohamed Mustahsane, y su director general, el estadounidense Tom Virgets, fueron convocados por la Comisión de Investigación, compuesta por tres miembros y presidida por el serbio Nenad Lalovic, integrante de la Comisión Ejecutiva del COI y presidente de la Federación Internacional de Lucha.
Esta Comisión de Investigación, que ha recibido ya las respuestas de la AIBA a más de cincuenta preguntas, brindará su informe final a la Comisión Ejecutiva del COI. En base a ese documento, el COI, que se reúne el miércoles con su presidente Thomas Bach,podría decidir que se retire a la AIBA la organización del torneo de boxeo en Tokio 2020.
Si la AIBA es finalmente apartada, algo que supondría un hito en la historia olímpica reciente, el COI asumiría directamente la organización del torneo olímpico y también de las competiciones clasificatorias para el mismo.
Por lo tanto, perder la organización del torneo olímpico sería un golpe durísimo para la AIBA, que vería también evaporarse la crucial ayuda financiera que aporta el COI una vez cada cuatro años a las federaciones internacionales participantes en los Juegos Olímpicos. En el caso del boxeo, esa aportación está estimada en 15 millones de dólares(13,3 millones de euros).
Con información de AFP – Fuente: Infobae