Con un segundo tiempo para el recuerdo, el conjunto dirigido por Maurizio Sarri fue mucho para el Arsenal de Unai Emery, que no tuvo lugar a la remontada en Azerbaiyán.
Chelsea goleó 4-1 a Arsenal en el Estadio Olímpico de Bakú y se consagró campeón de la UEFA Europa League. El belga Eden Hazard fue la figura indiscutible en lo que pudo haber sido su último partido con la camiseta de los Blues.
El primer tiempo fue parejo pero sin nivel de una final. Con aisladas situaciones claras para ambos equipos no se notó la magnitud del encuentro y todo quedó pospuesto para la segunda mitad.
En el complemento todo cambió o, mejor dicho, los dirigidos por Sarri lo hicieron. Fueron más punzantes a la hora de atacar y en una ráfaga, a los 49, 59 y 65 minutos se pusieron tres tantos arriba con los goles de Oliver Giroud, Pedro y, el antes mencionado, Hazard, en ese órden.
La respuesta de los Emery no tardó en llegar. Buscándolo por vergüenza deportiva, el nigeriano Alex Iwobi encontró un rebote en el área y con una volea precisa marcó el descuento, que ilusionó a todos los hinchas de los Gunners a los 68′.
Sin embargo, Hazard, en lo que pudo haber sido su despedida, volvió a frotar la lámpara y tras una pared con el francés Giroud anotó un verdadero golazo, a los 71′, para decretar el 4-1 definitivo y colgarse la medalla de campeón en Azerbaiyán.
De esta forma, Chelsea consiguió su segunda Europa League, teniendo en cuenta la edición 2012/13 que le ganó a Benfica, mientras que a Arsenal se le volvió a negar la chance, luego de lo que fue la final perdida ante Galatasaray en la temporada 99/00.
Fuente: AFP / Kirill Kudryavtsev